Érika González brilla con luz propia


La ciudad de  Durango (México) está resurgiendo como uno de sus mejores semilleros de grandes silbantes en el entorno profesional y amateur, y como prueba Érika Monserrat González Nevárez brilla con luz propia en el arbitraje de México.
Érika Monserrat comenta que la llevó a involucrarse dentro del arbitraje: “Todo empezó por que yo quería practicar un deporte, aunque yo siempre he practicado el futbol, pero necesitaba algo, la verdad, algo económico pero relacionado con el deporte, y una amiga me platica del arbitraje, entro principalmente por lo económico y ya después esto me apasionó y ahora soy arbitra profesional”.
Aunque confiesa: “Al principio sí era complicado porque no estaba acostumbrada, porque es difícil que una mujer ponga el orden ante 22 jugadores, pero lo vas manejando, de la manera que sea amena para ellos pero que no sea complicado para mí, hacemos ese vínculo para que no haya problema entre los dos”.
Como profesional, lleva una preparación diaria para estar para estar preparada para cualquier compromiso de futbol: “Practicamos todos los días, entrenamos por las mañanas y tardes, igualmente con prácticas teóricas –por todo lo relacionado con el reglamento- y físicas, sin olvidar que el amateur nos ayuda mucho para ir desenvolviendo todo el reglamento que se debe emplear en una cancha de futbol tras un encuentro”.
Por el momento su carrera profesional en el arbitraje es: “He estado en compromisos de tercera división profesional en Saltillo y en Zacatecas, esto en el varonil, sin olvidar que dentro de la Liga MX femenil ya debuté como asistente, ahora, mi sueño es debutar en el máximo circuito profesional de la Liga MX Femenil pero como árbitro central”.
Érika se despide con un mensaje hacia las mujeres: “Yo las invito a que se animen, al principio es difícil por estar con puros hombres, pero aprendes demasiado, ganas como persona y pones en alto el nombre de la mujer, porque no todos los días ves a una dama poniendo el orden en un terreno de juego”.


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