Endriana Daza, en busca de sus sueños

La árbitra colombiana Endriana Daza vive el fútbol a plenitud. Es cartagenera, tiene 23 años y desde hace cinco se inició como árbitra, una carrera que significa mucho para ella.

“Terminé metida en esto sin querer queriendo. Yo jugaba fútbol en el equipo Talentos y una vez un amigo me dijo que se quedaron sin árbitro y que le hiciera el favor de pitar el juego. Lo hice bien, me gustó y aquí me quedé”.

Se desempeña como asistente o línea. Siempre está presta intervenir en el juego con sus decisiones apoyándole al árbitro central del compromiso.

“Acumulo entre 45 y 50 partidos a nivel profesional. Me encanta lo que hago, admiro mucho a Mary Blanco, una asistente de línea que lleva una gran carrera hasta el momento, pero mi gran ejemplo a seguir siempre ha sido Abraham González, quien me ha enseñado todo lo que sé”.

Reconoce que no ha sido fácil avanzar en esta actividad porque le ha tocado duro con el machismo que se ve en esta sociedad.

“A pesar que me estaba preparando los retos iniciales cuando uno comienza en esto son bravos, he recibido amenazas de agresión física de entrenadores de algunos equipos porque no están de acuerdo con decisiones en un partido. No ha sido fácil, pero esto me gusta demasiado y por eso he seguido adelante”.

Alterna el arbitraje con los estudios:

“Terminé mi bachillerato hace algunos años. Este año comenzaré a estudiar Licenciatura en Educación Física. Los estudios siempre serán importantes”.

El arbitraje es muy difícil, en el que hay que entrenar y capacitarse. Es una profesión más que requiere de mucho sacrificio y dedicación.

“Nosotras entrenamos de lunes a jueves muy duro. El viernes es de mucha lectura, capacitación, enseñanzas de las reglas, actualizaciones, ejemplos y muchas otras cosas que nos sirven para nuestro crecimiento. Los fines de semana oficiamos como árbitras en partidos de la Liga de Fútbol de Bolívar en dos o tres juegos al día”.

Quedó fascinada con el aporte arbitral femenino en el último Mundial de Fútbol de Qatar:

“Es una alegría inmensa ver a árbitras en campeonatos del mundo. Ese es el futuro que yo quiero para todas nosotras. Esas mujeres que estuvieron en el juego Costa Rica - Alemania nos abrieron las puertas y sé que muchas de nosotras, con este tipo de logros, estamos más cerca de conseguir nuestros sueños”.

Fuente: EL UNIVERSAL