Racismo contra un árbitro: “Moro de mierda. Cuando salgas de aquí te voy a matar”

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Hace unos días, en el fútbol gallego se volvió a vivir escenas dantescas de xenofobia. Este lamentable incidente lo vivió el único árbitro saharaui que ejerce en la provincia de Lugo, Sadoum Bahia Saghair (22 años) que lleva cuatro años arbitrando en Segunda Regional de Galicia.
El pasado domingo, en el encuentro de la  Segunda Regional de Galicia entre los equipos Meira y el Matela, y cuando corría el minuto 15 de la primera parte, el entrenador local entró en el terreno de juego para atender a un jugador de su equipo lesionado. Fue cuando dicho entrenador se revolvió hacia el árbitro, Sadoum Bahia Saghair, diciendo: “Eres un sinvergüenza. Moro de mierda. Cuando salgas de aquí te voy a matar. Puto negro de mierda”.
El colegiado activó el protocolo que establece la federación gallega ante amenazas de este tipo y solicitó al delegado del Meira la presencia de la fuerza pública. Aunque le fue denegada en un primer momento, un instante más tarde se le comunicó la llamada a la Guardia Civil.
Durante la segunda parte, con los agentes ya en las instalaciones deportivas, el entrenador del Meira continuó con sus amenazas: “Ten huevos a parar el partido. Negro de mierda. Voy a reventarte a hostias, hijo de la gran puta. De aquí no sales vivo, quedas avisado “. Del mismo modo, el partido se detuvo dos minutos porque un espectador con indumentaria del Meira interrumpió el juego dirigiéndose al colegiado y espetándole: “Tienes suerte de que esté aquí la Guardia Civil, si no, te iba a reventar a hostias, puto moro de mierda”.
Seguidamente, no contento con las amenazas, saltó al terreno de juego y tuvo que ser sujetado por dos jugadores locales, y al mismo tiempo el delegado del equipo local convenciéndole para que por favor abandonase el terreno de juego.
Las amenazas se repitieron hasta el pitido final dirigiéndose al árbitro de modo agresiva: “Me viene a dar la mano y roza mi pómulo derecho con su frente, teniendo que ser sujetado nuevamente por tres jugadores del equipo visitante”, pero en el camino al vestuario volvió a aparecer: “Me da dos palmaditas en la espalda, teniendo que ser nuevamente sujetado por un jugador del equipo local”.
Todo está redactado detalladamente en el acta del partido y a la espera de que el Sadoum Bahia interponga la pertinente denuncia.
En estos momentos, Sadoum se plantea dejar el arbitraje, pero sus amigos le animan para seguir: “El arbitraje es mi pasión y voy a los partidos con la ilusión de hacerlo bien. Tú no te esperas salir humillado, vejado e insultado. El domingo me sentí muy mal y ahora me planteo dejarlo. Pero, por otra parte, mucha gente me apoya y arropa para que continúe”.


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