Navarra tiene un árbitro internacional en fútbol sala

David Urdánoz ocupará una de las plazas libres que dejan, el 31 de diciembre, Gutiérrez Lumbreras y Francisco Peñase que se retiran por la edad. El Comité Navarro ya puede presumir de tener dos árbitros internacionales: Alberto Undiano Mallenco y David Urdánoz.

¿Cómo es el proceso para ser árbitro internacional?

-Uno es árbitro FIFA normalmente es para siempre. A España le corresponden cuatro árbitros FIFA. Este año se retiraban dos árbitros FIFA de España, los dos por la edad. Yo era uno de los candidatos por edad y por experiencia, pero había que pasar un examen específico de inglés, porque FIFA lo demanda. Así que se unen los exámenes de Reglamento, los informes, los partidos, las clasificaciones de otros años... Es un compendio. Esto ocurre una vez cada varios años y, en principio, hasta dentro de siete años no habrá otra plaza. Para aspirar tienes que tener menos de 38 años, pero hace falta tener experiencia. Al final estábamos diez o doce aspirantes. Como todo en esta vida hay que estar en el lugar adecuado, en el momento adecuado, porque yo no me considero ni mejor ni peor que el resto de mis compañeros de Primera División. Los 40 somos igual de válidos.

¿Necesitó preparación especial de inglés?

-He tenido suerte y lo estudié en el colegio, en la universidad y en el trabajo también lo manejo. Aunque, en la práctica, puede pasar de todo con el idioma, porque los árbitros lo tenemos que conocer, pero no es obligatorio para los jugadores. Una vez me tocó pitar un partido amistoso internacional ante un equipo japonés y al hacer el sorteo, en inglés cara o cruz es heads or tails. Le pregunté al capitán japonés y se me quedó mirando sin saber de qué le hablaba. Así que decidí decir: azul o amarillo. Y todos nos entendimos. Por eso lo del inglés, a veces, por mucho que sepas, puede ser que el jugador no lo conozca, pero te entiendes.

¿Qué supone empezar a ser internacional a partir del 1 de enero?

-Cuando llegas a ser internacional, hay tres grupos. Empiezas en el grupo 3, el de abajo, y según los partidos y cómo lo hagas puedes ascender al grupo 1, que es el de los Mundiales y los campeonatos continentales. En fútbol sala, las competiciones internaciones son costosas y no se hacen muchas. No es como en fútbol. En España en fútbol hay diez árbitros FIFA y en fútbol sala, cuatro.

Tras diez años en Primera, ¿qué premia este título FIFA?

-Es la recompensa a un trabajo diario, a un trabajo callado, al tiempo que quitas a la familia y a los amigos en todos estos años. Al final un árbitro ni gana ni pierde. Cuando mejor hace su trabajo, es cuando nadie habla de él. Así que cuando llega una noticia así es un orgullo, y sobre todo para un comité tan pequeño como el de Navarra. Los cuatro internacionales de España somos de Andalucía (dos), Murcia y Navarra, y comités como Madrid, Cataluña, Castilla León... no tienen representación.

¿Era su aspiración ser internacional?

-Eso nunca te lo puedes plantear como un objetivo. Sí es cierto que he pitado muchos años con Ángel Sanzol y él siempre me decía que yo iba a ser el primer árbitro internacional navarro, pero yo nunca lo vi como una posibilidad real. Pero cuando llega una cosa así es un orgullo, y más ahora que tienes compañeros que están empezando y se fijan en ti y te siguen un poco como modelo.

¿Cómo ha cambiado Urdánoz desde que empezó a arbitrar en Primera?

-Siempre digo que el arbitraje me ha dado a mí como persona más de lo que yo le he dado a él. He evolucionado como persona. Cuando uno empieza, aprendes por errores, tienes otra forma de ver la vida. Es como el que aprende a conducir. Al principio te fijas en detalles y después son movimientos que ya automatizas. Realmente ahora estás pensando en lo importante, anticipándote a las jugadas, leyendo la intrahistoria del partido, el momento psicológico de los equipos...

¿Cómo empezó a arbitrar?

-Yo jugaba al fútbol sala en la Universidad Pública y Eduardo De Lorenzo, que era es delegado de fútbol sala en el Comité Navarro, se ofreció a dar unas charlas de Reglamento, porque nosotros mismos éramos los que nos arbitrábamos. Fui el único de todos los equipos en acudir a la reunión y una vez allí me dijo si me animaba a arbitrar fútbol sala en la Federación. Así empecé. Pensé que si arbitraba durante el año, no tenía que trabajar durante el verano. Miras hacia atrás y da un poco de vértigo, pero ha sido bonito y estoy muy contento y muy orgulloso de todo. Es gratificante vivir la ilusión de los que empiezan. Proyectas esa ilusión del principio y es muy bonito.

Entre todas las felicitaciones, ¿con cuáles se queda?

-Con las de la familia, porque es la que sufre los momentos ingratos, los que están ahí cuando tú lo pasas mal... También me felicitaron los equipos navarros, Ángel Sanzol, con el que pité nueve de los diez años en Primera. Si hoy he llegado hasta aquí, es por él.

Noticia e imagen: Noticias de Navarra